“El niño del cerro El Plomo”, de la editorial Muñeca de Trapo, obtuvo uno de los premios más relevantes en Latinoamérica como reconocimiento a los “Mejores Libros para Niños y Jóvenes 2022” entregado por el Banco del Libro de Venezuela. La obra ficciona un suceso de nuestra historia e invita a reconectar con él introduciendo conceptos informativos. César Sandoval y Gabriela Germain comentan el proceso de unir piezas para contar este relato del pasado. “Este cuento aporta mostrando una cultura anterior que sigue presente en nosotros y en particular es un homenaje para este niño y para el mundo que se fue con él”, recalca César.

¿De dónde surge el interés por contar la historia del niño del cerro El Plomo?

César Sandoval: En el año 2012 me llegó una invitación para conocer al niño del cerro El Plomo y su historia me conmovió profundamente.

Gabriela Germain: A mí me presentaron el trabajo de César y fue mi primera aproximación al tema, desde ahí tuve que interiorizarme.  

¿Qué tan complejo fue para ustedes desarrollar este libro?

Gabriela Germain: La idea de ampliar el objeto libro la llevo conmigo desde hace mucho tiempo y en mi proceso de hacer las ilustraciones tuve que profundizar en los significados para poder dibujarlos, entonces si yo tuve que investigar para entender el texto supuse que al lector le pasaría lo mismo.

César Sandoval: Al escribir el cuento no lo pensé para niños. Entonces, cuando Muñeca de Trapo se interesó en él, lo tomó en su relato original porque tiene una mirada más amplia de lo que es un libro para la infancia. En el trabajo editorial uno tiene una idea, pero la gracia de estos textos es que permiten diversas formas de leerlo. 

¿Cómo fue el proceso de elaborar la historia de una situación medianamente desconocida?

César Sandoval: Necesitaba darle un contexto, abordarlo desde el respeto y, por eso, hay un trabajo de investigación, pero también me permito construir desde la fantasía.

Gabriela Germain: Fue complicado. En el paso desde la idea al papel, aparecieron algunos vacíos que me obligaron a buscar información.

¿De qué forma logran contarles a los niños una historia con diversas emociones?

Gabriela Germain: El libro trata un tema duro, pero he aprendido que los niños son sabios. Me centré en la figura de la madre, aunque no sabemos si estuvo ahí, porque me pareció hermoso enfatizar en el acto de entrega de una madre a otra que es la tierra. Lo más bonito es ver que ellos lo entienden y les provoca reflexiones profundas.

César Sandoval: El no tener pensado a qué público iba dirigido me permitió escribir sin presión y eso generó que la editorial considerara este cuento por su temática y la forma en que quedó plasmada.

¿Cómo lograron que el libro fuese atractivo para un público de diversas edades?

César Sandoval: No lo tengo claro, pero el conjunto del libro es un bonito trabajo tanto como objeto y su contenido. 

Gabriela Germain: Es una historia universal que tiene su raíz en algo común para las personas. Cualquiera puede entenderla porque tiene elementos con los que construimos la vida.

—¿De qué manera sienten que su libro forma parte del proceso de revalorizar nuestra cultura?

Gabriela Germain: La cultura es aprendizaje y mirar hacia el pasado es importante para mirar hacia adelante. Estamos en una época en la que nos sentimos viviendo el final de algo que dará para un nuevo principio y el libro nos muestra que la historia está llena de estos episodios.

César Sandoval: Es fundamental retomar nuestras raíces y este cuento aporta mostrando una cultura anterior que sigue presente en nosotros y en particular es un homenaje para este niño y para el mundo que se fue con él.