“Oso hormiguero” de la editorial Muñeca de Trapo aborda el acoso a partir de una historia que vive un animal en la Amazonía. Su autora Vanesa González comenta la importancia de trabajar con empatía estas situaciones. “Quiero que se queden con la idea de que hay que ponerse en el lugar del otro, de que las cosas pueden tener solución trabajándolas en equipo y siendo una comunidad empática”.
Tú eres de Madrid, ¿cómo ha sido publicar con una editorial latinoamericana como Muñeca de Trapo?
Ha sido precioso porque tengo muchos vínculos con América Latina y el hecho de que una editorial chilena haya querido publicar un texto mío es un honor y un privilegio.
¿Por qué consideras importante abordar el bullying?
Soy profesora de inglés de enseñanza secundaria y vemos estos casos a diario. Cada vez más se observan niños que pasan de ser víctimas a victimarios. Los profesores de primaria me comentaban que, aun cuando hay libros con esta temática, no son tan visuales, por lo que no sirven para trabajarlos con la niñez, por ello, quise escribir algo llamativo para la infancia.
¿La idea de este relato surge de algo que presenciaste?
Sí, además de las que veo a diario en mis aulas, la idea surge en específico por un colegio de primaria en el que estaban con varios casos de bullying en un curso y tenían una necesidad de encontrar literatura que pudiera apoyar a sus docentes.
¿Por qué elegiste animales para representar esta situación?
Mi hijo estaba estudiando los hábitats del mundo -uno de ellos era la Amazonía- y a mí me fascinaron todos esos animales exóticos. A su vez, quería escribir de una manera más metafórica para que el mensaje no fuera tan duro.
¿Qué representan las hormigas en el relato?
El objetivo de las hormigas es mostrar que no ponemos atención en los seres que no se ven, aun cuando, siempre son los que están ayudando. Ellas encarnan esa idea de que es importante ver a todos, a los que no dicen nada, pero que están trabajando en comunidad.
¿Crees que tu libro sirve para hablar del bullying tanto con víctimas como victimarios?
Sí, el libro abre conversaciones como, por ejemplo, ponerse en el papel del victimario. Hay muchos niños que están en esa situación porque han vivido experiencias muy duras y ellos mismos han sido, en algunos casos, víctimas de bullying.
¿De qué forma las ilustraciones de Canizales construyeron lo que querías transmitir?
He admirado desde siempre a Canizales, en mi casa han estado presente sus libros por mi hijo. Me parecen dibujos tan coloridos y llamativos que cuando iniciamos el proyecto con Macarena, pensé en la posibilidad de que él fuera el ilustrador. Para mí fue perfecto, ya que le daba vida a las palabras y a las emociones de cada personaje.
¿Con qué sensación quieres que se queden los lectores al momento de terminar el libro?
Quiero que se queden con la idea de que hay que ponerse en el lugar del otro, de que las cosas pueden tener solución trabajándolas en equipo y siendo una comunidad empática.
¿Qué ha significado “Oso hormiguero” para ti?
Ha significado plasmar un proyecto bellísimo con el apoyo de la Directora Editorial Macarena Morales, de Canizales y de la editorial Muñeca de Trapo. He podido ver cómo el libro recorre ferias, colegios y bibliotecas, y que está siendo leído en varios países.